La agencia de noticias Télam, quien precisó que los meteoritos se
encontraban en las habitaciones, el garaje y el jardín, "enterrados a
pocos centímetros de la superficie" en una vivienda del barrio Belgrano
de Quimilí.
Próximo al límite con la provincia de Santiago del Estero y 334 kilómetros al sudoeste de la capital santiagueña se ubica Gancedo, a cuya jurisdicción corresponde Campo del Cielo, donde se hallaron los meteoritos El Chaco –de 37 toneladas de peso y el segundo más grande del planeta–, Las Víboras, La Sorpresa, La Negra y el Wichí, entre otros cuerpos identificados en la zona.
El paraje Las Víboras, 15 kilómetros al sur de Gancedo, se volvió célebre para los astrofísicos en el año 1969, cuando el lugareño Raúl Gómez encontró un cráter. Excavado por el doctor William Cassidy, allí se encontró enterrado un inmenso meteorito que fue extraído en 1980 por la Fuerza Aérea Argentina, en plena dictadura cívico-militar. El propio Cassidy lo bautizó "El Chaco".
El meteorito fue pesado originalmente en una balanza comercial de Gancedo, que registró 33,4 toneladas. Sin embargo, en 1990 hubo un intento de llevarse ilegalmente el meteorito para venderlo en el exterior, utilizando una grúa, que registró el peso de 37 toneladas. «
Próximo al límite con la provincia de Santiago del Estero y 334 kilómetros al sudoeste de la capital santiagueña se ubica Gancedo, a cuya jurisdicción corresponde Campo del Cielo, donde se hallaron los meteoritos El Chaco –de 37 toneladas de peso y el segundo más grande del planeta–, Las Víboras, La Sorpresa, La Negra y el Wichí, entre otros cuerpos identificados en la zona.
El paraje Las Víboras, 15 kilómetros al sur de Gancedo, se volvió célebre para los astrofísicos en el año 1969, cuando el lugareño Raúl Gómez encontró un cráter. Excavado por el doctor William Cassidy, allí se encontró enterrado un inmenso meteorito que fue extraído en 1980 por la Fuerza Aérea Argentina, en plena dictadura cívico-militar. El propio Cassidy lo bautizó "El Chaco".
El meteorito fue pesado originalmente en una balanza comercial de Gancedo, que registró 33,4 toneladas. Sin embargo, en 1990 hubo un intento de llevarse ilegalmente el meteorito para venderlo en el exterior, utilizando una grúa, que registró el peso de 37 toneladas. «